Volver a los 17 (o a los 27)
Miércoles, 15.30. Nos subimos a un autocar. Veinticuatro horas y media después, llegamos a San Pedro de Atacama, un oasis en el desierto de (¿lo adivinan?) Atacama.
Durante el trayecto, los pasajeros (los otros) han ido rejuveneciendo: al principio del viaje, el bus está lleno de gente mayor; al final, todo son jóvenes mochileros.
Leo Jardines de Kensington, novela de Rodrigo Fresán que empieza así:
Empieza con un niño que nunca fue adulto y termina con un adulto que nunca fue niño.
P.D. Fresán tiene otra novela, titulada Vidas de santos (creo). No sé si hablará de los cuatro que han marcado el inicio del viaje: San Pablo, San Telmo, Santiago y San Pedro.
Etiquetas: chile, san pedro de atacama, santiago
entrada de Alberto Ramos a las
12:11
3 comentarios:
tal vez hable de santos que acabaron pecadores, o viceversa
12 de marzo de 2007, 5:49
vida de santos es una coleccion de cuentos post borgianos que se asimilan con el placer de una (buena) cancion pop. son historias argentinas entrelazadas por los cameos de un hippie pequeño, barbon y mal agestado llamado JC, quien carga con la no despreciable cruz de ser el hermano anónimo y perdedor de la celebridad mas famosa del mundo (despues de Los Beatles, claro esta):
el nazareno, yisis, jesucristo.
recomendado. de la literatura chilena en tanto te recomiendo ygdrasil.
12 de marzo de 2007, 16:19
Ariadna, en el desierto de Atacama hay cuatro volcanes llamados San Pedro, San Pablo, Putana y Laskar (o algo parecido). Los pecadores deben de ser los dos primeros.
Luponce, gracias.
14 de marzo de 2007, 17:34
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